lunes, 28 de octubre de 2013

Que nunca acaba

¿Quién me tenderá una mano amable
que me saque de mi locura?
¿Cuándo diré adiós al miserable
que cada día me tortura?

Dos años ya de tenebrosa soledad,
sin cariño ni consuelo.
¡Ah sí cariño!¡Tú eres mi consuelo!
con palabras al viento que me das.

Podría recitar una y mil veces
el futuro que acabo de soñar:
se multiplicaron los panes y los peces,
soy el pájaro sin alas que puede volar.

Pero el tedio,
los días,
este asedio
sin tu sonrisa…
Pasará un milenio
por mi vida
y nunca llego
a la esquina
de mi sosiego.

No hay comentarios:

Publicar un comentario